Contar con una comunidad
- Amazonia Arroyo
- 28 abr 2024
- 4 Min. de lectura
Cuando me mudé a Inglaterra, fui a estudiar inglés por 11 meses y recuerdo que a los 4 meses, tenía la necesidad de integrarme en la sociedad inglesa, conocer la cultura, mejorar mi inglés. Esta inquietud de salir un poco de mi burbuja estudiantil para integrarme más con mi entorno se la compartí a mi tutora del curso. Recuerdo que me sugirió empezar a hacer voluntariado en las charity shops. Las ONG en Inglaterra, como la Cruz Roja, tienen tiendas de segunda mano donde venden desde muebles hasta ropa, y estas tiendas se convierten en fuentes de ingreso que les ayudan a seguir impactando a la comunidad y llevar a cabo sus proyectos. Ella me dijo que esta era una forma perfecta para practicar mi inglés y rodearme de personas nativas.

Fui voluntaria de la Cruz Roja en Inglaterra por un año y este espacio me dio muchísimo. Conocí a mi gran amigo Zheko, Sarah gracias a la Cruz Roja, conocí a Charlie, quien era dueño de un café al lado de la Cruz Roja, y empecé a trabajar en su café cuando obtuve mi permiso de trabajo. Gracias a este voluntariado, mi pareja de aquel entonces consiguió trabajo en la organización. Gracias a la Cruz Roja, conocí el valor que le dan los ingleses a la comunidad, a reciclar, a dar. Una gran mayoría de los voluntarios eran personas con discapacidad; por ende, las tiendas benéficas en Inglaterra contribuyen a la inclusión de personas con discapacidad. Gracias a la Cruz Roja, hicimos un evento que nos ayudó a Reny, Ivan y a mí a probar nuestras recetas y el modelo de negocio de las arepas, y ver cómo lo recibía el mercado británico.
Existe un público muy grande de personas que tienen diferencias acerca de las organizaciones sin fines de lucro. Sin embargo, para mí, que he vivido siempre de forma activa, participando en diferentes organizaciones, veo el impacto social y económico que tienen para un país y lo mucho que pueden aportar, así como lo mucho que puedo aportar yo a estas organizaciones como individuo.

Uno de mis valores no negociables es la comunidad, y esto no viene de ser inmigrante, sino que viene desde que estaba en Venezuela, viene de una abuela y un abuelo que tenían esta humanidad compartida bien arraigada, viene del pueblo donde me crié.

Al llegar a Valencia, Rosmery, una amiga emprendedora que tiene un negocio en Valencia llamado Salú arte y vino, desde el día uno que llegué aquí, ella me ha estado ayudando y me dice: "La Cruz Roja empezará esta semana el curso para emprendedores, envíales un email". Los contacté y me aceptaron en el programa.
He experimentado un crecimiento educativo importante esta semana, entender el sistema español a nivel fiscal, financiero, en trabajar en las propuestas que tengo, en plantearme nuevas ideas. Esta semana, la Cruz Roja me ha ayudado en mi proceso de empezar en un nuevo país.
Esta semana recibí una formación tan completa e importante que todos los días me he levantado con un profundo agradecimiento a la vida, que me está mostrando el camino y me está dando las herramientas que necesito.
Me he conectado con gente espectacular y comprometida, con ganas de aportar muchísimo a la ciudad. Ha sido una semana donde he vivido "la humanidad compartida", con un networking de emprendedores que me han inspirado y me han recordado que no debo dudar de que un pequeño grupo de ciudadanos comprometidos y conscientes puede cambiar el mundo; de hecho, es lo único que siempre lo ha hecho, frase de Margaret Mead.
Los facilitadores de este curso son voluntarios que ya tienen negocios, que han trabajado en la banca y deciden invertir tiempo para ayudar en este proyecto. Y como dice George Eliot (novelista): "Bendita es la influencia de un alma humana que verdaderamente ama a otra". Hoy, gracias a cada persona que me está ayudando en esta transición, ¡gracias!
Me parece curioso el impacto que ha tenido la Cruz Roja por segunda vez ahora en mi vida, ayudándome en este proceso migratorio y de cambio de carrera. Hoy agradezco a las personas que donan dinero y su tiempo para que programas como estos existan.
Recuerdo que una de las muchas críticas que recibía de personas externas como fundadora de Todo por Mil Sonrisas era que la gente comentaba: "Pero la ropa no ayudará a solucionar el problema, un juguete, etc.", y se nos olvida que es un derecho jugar, vestirnos, educarnos, la salud.

Debo ya arreglarme para empezar mi círculo de lectura con él en el Huerto del Lector una de mis comunidades más poderosas que me sostienen, y justo empezamos el libro Humanidad Compartida por Claudio Araya Veliz, y nada es casualidad, justo en este momento de crear mi propia comunidad en Valencia y en este proceso tan expansivo que estoy viviendo.
Gracias por leerme y quédate con lo que resuene para ti en este escrito. Pero si te digo: hay mucho que puedes dar y mucho que puedes compartir, hay mucho que puedes recibir, hay muchas personas que quieren compartir contigo, ábrete al mundo!

Amazonia Arroyo
Naked Woman
Hard to think of a better way to connect with your community than helping others through volunteering. You're making your new home a better place. What kind of things are you learning through the Red Cross program? It is great how the world "gives back": You give your time and energy, and you are rewarded with free education! Wonderful.
I'm proud of you, Amazonia. Thanks for continuing to write.
Amiga está increíble. Muchas gracias por compartir aquí en Francia las asociaciones me han brindado mucha ayuda también es realmente increíble todo lo que hacen y ver a sus voluntarios dedicarse tan humanamente al que pueden es de inspiración.